Malformaciones fetales no detectadas en las ecografías durante el embarazo

Malformaciones fetales no detectadas en las ecografías durante el embarazo
Malformaciones fetales no detectadas en las ecografías durante el embarazo

Carga de trabajo y falta de tiempo para la valoración adecuada

El subdirector de la unidad de ecografías del hospital admitió que, debido a la elevada carga de trabajo, los médicos dedicaban solo siete minutos por paciente, cuando los protocolos de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia recomiendan un mínimo de 20 minutos para realizar una valoración detallada del estado del feto. Este fallo en la organización, reconocido por escrito por los responsables del hospital, tuvo consecuencias fatales, como se refleja en este caso.

Fallos en el seguimiento y diagnóstico prenatal

El embarazo fue objeto de un seguimiento continuado, pero las anomalías evidentes, como la ausencia de brazos y otras deformidades físicas, no fueron detectadas. Incluso en la ecografía de la semana 20, clave para el diagnóstico de posibles malformaciones y para considerar una interrupción legal del embarazo, el informe concluyó que no había ninguna anomalía, calificando el embarazo como "normal y adecuado". Esto ocurrió a pesar de que el protocolo de estudio prenatal exige un análisis exhaustivo, especialmente en casos de embarazo de riesgo, como el de la demandante.

Cuando otro médico observó "algo raro", la madre fue remitida a la Unidad de Medicina Fetal, donde se le realizaron nuevas pruebas, incluyendo una ecografía más avanzada. Sin embargo, a pesar de contar con tecnología de alta resolución, los médicos tampoco detectaron las graves malformaciones del bebé.

Injustificable negligencia médica

El abogado de la familia, José Miguel Castillo-Calvín, destacó la gravedad de los errores cometidos: "Con la tecnología tan avanzada de la que dispone el hospital, resulta grotesco que no se percatasen de estas malformaciones". A pesar de las múltiples pruebas realizadas, la mujer dio a luz a un bebé con graves malformaciones, que incluían ausencia de brazos, pies cortos, pliegue nucal aumentado, piernas en sable y deformaciones en la cabeza, todas ellas asociadas al síndrome de Cornelia de Lange.

Informe de la Consejería de Salud y resolución del SAS

Tras una investigación interna realizada por la Consejería de Salud, se concluyó que la razón de estos fallos radicaba en problemas de organización del centro y en la sobrecarga de trabajo del equipo médico, lo que les impedía realizar valoraciones detalladas de las ecografías. Además, se destacó que la paciente no fue informada de los riesgos ni de la fiabilidad de los diagnósticos, algo que el SAS reconoció como un error.

A pesar de la gravedad de las malformaciones, el primer informe del SAS intentó minimizar el fallo, argumentando que las ecografías "no son una ciencia exacta" y que la anomalía "no era tan evidente". Sin embargo, esta posición fue contradicha por la inspección interna, que concluyó que la ecografía de la semana 20 no cumplió con los requisitos diagnósticos necesarios, reconociendo así el error médico.

El SAS dictó una resolución para indemnizar a la familia, aunque la cuantía ha sido recurrida en los tribunales por considerarse insuficiente para reparar los daños causados.

Consecuencias legales de la mala praxis médica

Este caso pone de manifiesto la importancia de una praxis médica adecuada y del tiempo necesario para la valoración exhaustiva de pruebas diagnósticas. La falta de tiempo y la sobrecarga de trabajo no pueden justificar la negligencia en diagnósticos tan sensibles, especialmente en embarazos de riesgo, donde la detección precoz de malformaciones puede ofrecer opciones importantes para los futuros padres.

El SAS ha reconocido sus fallos, pero este caso pone de relieve la necesidad de reformar los procedimientos y mejorar las condiciones de trabajo de los médicos para evitar futuros errores con consecuencias tan devastadoras.

La pareja demandó al Servicio Andaluz de Salud tras el nacimiento de su hijo con graves malformaciones físicas, que no fueron detectadas en las ocho ecografías realizadas durante el embarazo en el Hospital Virgen de las Nieves de Granada. Entre las malformaciones, destaca la ausencia de brazos, vinculada al síndrome de Cornelia de Lange. A pesar de que las ecografías y análisis calificaron el embarazo como "perfectamente normal", las anomalías no fueron detectadas hasta el nacimiento.

Malformaciones fetales no detectadas en las ecografías durante el embarazo
Malformaciones fetales no detectadas en las ecografías durante el embarazo